A estas alturas, ¿quién no ha oído hablar del yoga? Esta tradicional disciplina tanto física como mental tiene su origen en la India. Su nombre está relacionado con «concentrar la mente» o «absorberse en meditación«, y está asociada a diferentes prácticas de meditación como el budismo o el hinduismo.Según las estadísticas, las personas que practican yoga requieren menos veces cualquier tipo de ayuda médica. ¿Quieres saber qué beneficios aporta, exactamente, el yoga a tu salud? ¡Continúa leyendo!

Hace años, investigadores de la Universidad de Pensilvania descubrieron que practicar yoga ayuda a combatir la hipertensión, que a su vez, disminuye el riesgo de padecer cualquier enfermedad cardiovascular.

Por otro lado, en la India recomiendan adoptar las posturas de yoga a menudo dado que reduce los niveles de colesterol en la sangre y es capaz de descender la acumulación de grasa en las arterias.

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Las posturas del yoga, que combinan movimientos corporales y respiración, son capaces de acabar con los dolores de espalda crónicos; si hace unos años se recomendaba la natación en estos casos, desde hace un tiempo los especialistas recomiendan aprender a realizar posturas de yoga, y establecerlas en la rutina diaria. Por ejemplo, puedes incluir la práctica de yoga unos minutos antes de desayunar, o antes de irte a la cama.

El yoga también ayuda a prevenir fuertes dolores de cabeza o cefaleas (migrañas). Y por si fuera poco, análisis de sangre llevados a cabo en la Universidad de Ohio, determinaron que el hecho de practicar esta disciplina reduce la interleucina-6 en la sangre, molécula ligada a la respuesta inflamatoria del organismo que al parecer está implicada en  la aparición de artritis, diabetes e incluso infartos.